A juicio los tres acusados por acuchillar a ‘madame’ de Pezuela a manos de una de sus empleadas

Katy, una mujer que ejercía la prostitución y controlaba los turnos y los pagos en un bar de alterne de Pezuela de las Torres (Madrid) fue acuchillada salvajemente el 6 de febrero de 2023 en una de las habitaciones. Era lo que se conoce como una madame, una mujer prostituida de mayor edad que el resto de sus compañeras a la que ponían a cargo del día a día del local. Tenía 44 años, era de República Dominicana y su nombre real ni siquiera era Katy. El local, en este caso, era un bar cochambroso a las afueras del municipio y a ella le habían dado esta responsabilidad 15 días antes de su asesinato. El crimen llega a juicio dos años después y los acusados son: una de sus empleadas, un familiar de esta y su novio. La Fiscalía solicita entre 10 y 24 años de prisión para los tres inculpados.

El juicio está señalado para el día 22 de abril y se celebrará con jurado popular en la Audiencia Provincial de Madrid. El Ministerio Público considera a la empleada, llamada Lucía, y a su familiar como los autores materiales de haber “apuñalado repetidamente” a Katy. Según el escrito de acusación, el otro implicado en los hechos, pareja de Lucía, es cómplice de los hechos al haber propiciado un plan de huida porque los esperó con el coche en marcha a las puertas del bar mientras ellos cometían el crimen.

Según el relato de los hechos de la Fiscalía, sobre las cuatro de la tarde del 6 de febrero, Lucía y su pariente llegaron al local en el coche de su novio y accedieron juntos a través de un patio trasero. En el recorrido por el bar, el hombre se ocultó el rostro para evitar ser reconocido y la mujer iba guiando al otro por el interior del establecimiento. Finalmente, encontraron a quien buscaban en una de las habitaciones y se “abalanzaron sobre ella de manera súbita y sorpresiva con un cuchillo de grandes dimensiones”. La muerte fue casi inmediata. A continuación, se marcharon en el coche en el que les esperaba el tercer implicado.

Los tres acusados fueron detenidos entre el 19 y el 20 de marzo. El escrito de acusación considera que se trata de un asesinato en lugar de un homicidio por la nula posibilidad de defensa de la víctima, por la superioridad numérica de sus atacantes y porque la agresión fue por sorpresa. Tras el crimen, dos de ellos trataron de escapar de España y fueron detenidos justo en el momento en el que intentaban salir de Madrid. Para el familiar de Lucía, la Fiscalía pide 24 años de prisión, para la mujer, 22 y para el novio de esta, 10. El móvil del crimen fue, supuestamente, las desavenencias por la gestión del trabajo dentro y fuera del local y el cobro a determinados clientes.

La víctima estaba casada en el momento de su fallecimiento y dejó cinco hijos. El Ministerio Público pide una indemnización de 100.000 euros para cada uno de ellos.